Empieza una semana con mucha incertidumbre para todos los guatemaltecos
Tiempo de lectura aprox: 1 minutos, 12 segundos
Con muchas interrogantes y gran incertidumbre ha llegado el fin de semana a la ciudad de Jalapa, ya que se ha vuelto a tener alguna calma.
Luego de una semana en la que en Jalapa no hubo bloqueos, unas manifestaciones pero ya en horas de la noche frente al edificio del Ministerio Público y una este sábado por docentes en servicio y también algunos jubilados, luego se supo que vecinos de Santa María Xalapán habían ido a bloquear la ruta al Atlántico, pero todos los bloqueos a nivel nacional, vinieron a afectar la vida de los jalapanecos, ya que se encontraron con un alza incontrolable de precios en los productos de la canasta básica, la gasolina, el diesel escasearon y en algunas gasolineras llegó a terminarse, el gas un producto muy usado en los hogares también se terminó.
Las especulaciones empezaron con las amenazas de escasez ya que el maíz se elevó, el frijol, la papa, el tomate, la cebolla, aunque tristemente la institución que debe velar por los consumidores, la Diaco se ha desaparecido y no se ha tenido información con respecto a su trabajo, esto fue también denunciado por la PDH de Jalapa.
Ha venido el fin de semana, que ha dado un vuelco, porque se ha visto ingresar pipas con gasolina, por lo que ya hay combustible, el Mercado ha funcionado con normalidad aunque los precios altos se mantienen, los supermercados abrieron sus puertas, pero la incertidumbre continúa, porque no se sabe que es lo que ocurrirá a partir del lunes, ya que en la llamada mesa de dialogo no hay ningún acuerdo visible, las dos partes han dado su versión de lo platicado, pero nadie ha dado un paso adelante, ya que cuando hay mesas las dos partes deben dar algo en cuanto a avances, pero en esta no se dio absolutamente nada.
Se desconoce qué pasará en esta próxima semana, si habrá bloqueos, si habrán desalojos de parte de las autoridades, aunque habrá que reconocer que la situación esta muy difícil, porque existe mucho malestar de parte de la población que ha llegado ya a atacarse en los bloqueos o querer tomar algunas acciones más fuertes, lo que no beneficia a nadie.